La Celtis ehrenbergiana, también conocida como Tala, es una planta arbórea o arbustiva que se encuentra en América del Norte y América del Sur. Es una especie apreciada por su madera dura y pesada, así como por sus propiedades medicinales. En este artículo, te contaremos más sobre esta hermosa flor y su importancia en la flora argentina.
Distribución y hábitat de la Celtis ehrenbergiana
La Celtis ehrenbergiana se encuentra en países como Bolivia, Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina. En Argentina, se puede encontrar desde el norte del país hasta el sur de Buenos Aires, en provincias como Jujuy, Salta, Catamarca, Tucumán, La Rioja, San Juan, Mendoza, Formosa, Chaco, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Córdoba, San Luis, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires.
Esta planta se encuentra a menudo formando manchones, conocidos como Talares, a lo largo de arroyos, ríos y aguadas. También es común encontrarla al pie de alambrados y pircas, donde las semillas son dispersadas por los pájaros que han comido los frutos.
Características de la Celtis ehrenbergiana
La Celtis ehrenbergiana es una especie de porte mediano, que puede alcanzar una altura de entre 4 y 9 metros. Su tronco puede llegar a tener hasta medio metro de diámetro. Está recubierto de una corteza clara, de color pardogrisáceo, que se vuelve dehiscente en los ejemplares adultos.
Esta planta ramifica abundantemente, produciendo un denso enramado en zigzag con fuertes espinas geminadas en las axilas foliares. Sus hojas son alternas, pecioladas, simples, con la lámina aovada de hasta 35 x 20 mm. Presentan una base redondeada y un margen aserrado en la región apical.
Usos y propiedades de la Celtis ehrenbergiana
La Celtis ehrenbergiana tiene diversos usos y propiedades que han sido valorados a lo largo del tiempo. En medicina casera, se ha utilizado para tratar afecciones del pecho, indigestiones y constipados. Incluso durante el brote de cólera en la provincia de Córdoba, se utilizaron infusiones de las hojas de esta planta para tratar a las personas afectadas.
Además, las frutas de la Celtis ehrenbergiana son comestibles y su madera es fuerte, por lo que se utiliza para la fabricación de ejes de carretas, postes para casas, cabos de herramientas, entre otros. También es empleada por los torneros y es un buen combustible.
Importancia ecológica de la Celtis ehrenbergiana
La Celtis ehrenbergiana juega un papel importante en el ecosistema argentino. Su presencia en los Talares permite el desarrollo de una rica fauna, ya que proporciona protección y alimento a diversas especies de aves que anidan en ella. Algunas de estas aves incluyen la calandria, el espinero pecho manchado y el hornero.
Además, las hojas de la Celtis ehrenbergiana sirven de alimento para varias especies de mariposas, como el zafiro del talar, la picuda y la bellísima común. Estas mariposas contribuyen a la polinización de otras plantas y añaden belleza al paisaje natural.
La Celtis ehrenbergiana, también conocida como Tala, es una flor de gran importancia en la flora argentina. Su presencia en los Talares y su valor histórico y cultural la convierten en una especie emblemática en ciertas regiones del país. Además, sus propiedades medicinales y su madera versátil hacen de esta planta un recurso valioso tanto para la salud humana como para la industria.
Si tienes la oportunidad de observar una Celtis ehrenbergiana en su hábitat natural, tómate un momento para apreciar su belleza y su importancia en el ecosistema. Su presencia es un recordatorio de la diversidad y la riqueza de la flora argentina.